A simple vista, cuando nos adentramos en la fotografía submarina nos enfrentamos a muchos interrogantes a la hora de decidir cual es la mejor cámara de fotografía subacuática. Hay tantas opciones… elegir una buena carcasa, puertos, lentes, iluminación y otros accesorios, sin contar con el desembolso de dinero. Desde aquí, te damos algunas claves para encontrar la que mejor se adapte a tu situación.
Elegir una cámara de fotografía subacuática no tiene por que ser una experiencia estresante. Unicamente tenemos que saber lo que buscar y que productos hay en el mercado.
Índice
Aspectos a considerar para encontrar la mejor cámara de fotografía subacuática
Disponibilidad de carcasa
Lo primero que tendremos en cuenta a la hora de elegir la que más se nos adapta es saber si tiene carcasa subacuática disponible.
Generalmente, los mejores fabricantes de cámaras fotográficas como Canon, Nikon, Sonu, Panasonic y Olympus tienen disponibles, pero no todos los modelos son compatibles.
Presupuesto
La fotografía subacuática no es un hobby barato. El cuerpo de la cámara más la carcasa puede costar fácilmente 900 € (1000 $). A este presupuesto habría que incluir luces estroboscópicas y accesorios, así que recomendamos una compra inteligente.
A menudo, invertimos nuestro presupuesto en la compra de la cámara más cara del mercado sin caer en la cuenta de que al ir a por los accesorios correspondientes, son a menudo incluso más caros que la misma cámara.
Es por ello que recomendamos establecer un límite del total de gasto, contando con todos los equipos que necesitamos para trabajar.
Tipo de sistema
Hay tres formatos de cámara principales para elegir: compacto, sin espejo y DSLR (cámara digital réflex).
También hay algunas cámaras que se han fabricado específicamente para ser utilizadas bajo el agua, como la SeaLife DC1400. Sin embargo, según comentarios de fotógrafos que la han utilizado, parece no ser de las mejores y da algunos problemas.
Así pues, nuestra recomendación sería apostar por una cámara tradicional y conseguir una buena carcasa que se le adapte. También podemos optar por utilizar la cámara que ya tenemos en casa y comprar solo la carcasa. Opción mucho más económica que muchos buceadores eligen.
Cámaras compactas:
Esta puede ser una buena opción como cámara de fotografía subacuática, sin embargo, la función “auto” no funciona tan bien bajo el agua, así que la mejor opción es un modelo avanzado con modo manual.
A favor tiene que es la opción más barata y puede disparar macro y ángulo ancho en la misma inmersión con lentes húmedas.
En contra, un sensor pequeño (a excepción de la RX100), lo que significa un bajo promedio respecto al rendimiento de luz y nitidez. Su batería es de menor duración que la DSLR y el retardo del obturador marca una diferencia de tiempo entre el momento de la toma y cuando éste se abre.
Cámaras sin espejo:
Son extremadamente populares entre los fotógrafos subacuáticos, ya que proporcionan la versatilidad de lentes intercambiables sin el peso, el tamaño y el precio de una réflex digital. Este tipo de cámaras son ideales para los fotógrafos avanzados que quieren imágenes de alta calidad en un envase pequeño.
A favor, sensores 4-8x más grandes que las cámaras compactas. Más pequeña y ligera que las DSLR y una gran variedad de lentes.
En contra, no se pueden usar lentes húmedas, por lo que el ángulo de tiro está comprometido. Requiere múltiples puertos para el uso de diferentes lentes y son más caras que las cámaras compactas.
Cámaras digital réflex o DSLR:
Si bien hay muchas cámaras sin espejo que se acercan a la calidad de una réflex digital, éstas siguen siendo la elección de muchos fotógrafos profesionales. Tienen una gama más amplia de lentes, un increíble rendimiento con poca luz y ofrecen el máximo control sobre la foto.
A favor, mejor rendimiento con poca luz y nitidez, máximo control para los tiradores avanzados y mayor gama de lentes.
En contra, es más cara, grande y pesada. No se pueden utilizar lentes húmedas.
Aspectos a considerar
Encontrar una buena carcasa para la cámara de fotografía subacuática.
Como hemos mencionado anteriormente, pueden llegar a costar más que la propia cámara, por lo que elegir la más adecuada es una decisión muy importante, ya que te asegurará que tu cámara permanezca seca.
También protegen de la presión, permiten utilizar los controles de la cámara, habilitan el uso de diferentes puertos de lentes y mantienen accesorios, así que hay que asegurarse de invertir convenientemente en ella.
Las carcasas de cámaras están fabricadas en policarbonato o aluminio, con algunas excepciones que unen los dos componentes.
Las carcasas de policarbonato son bastante más asequibles que las de aluminio, pero son propensas al empañamiento y a menudo tienen botones de diseños no muy ergonómicos. Muchas carcasas de este tipo no son reparables, así que en caso de rotura habría que cambiarla por otra.
En cambio las de aluminio son extremadamente resistentes, ya que están fabricadas para el buceo en profundidad y la exposición prolongada al agua de mar. Tienen una gran ergonomía y los controles bien trazados.
Pueden durar años. Por ejemplo, se pueden reemplazar las juntas tóricas colocadas debajo de cada botón, de modo que si alguna falla no es necesario reemplazar la carcasa.
En contra, son demasiado caras. A veces hasta 3 veces más que las de plástico.
La explicación simple es que las carcasas de aluminio están pensadas para los fotógrafos profesionales y buceadores técnicos, mientras que las de policarbonato van mas destinadas a buceadores que las van a utilizar únicamente un par de veces al año.
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No obstante, Ikelite ha estado trabajando en diseñar una carcasa de plástico que incluso un profesional podría llegar a amar. Utilizan materiales de alta calidad ergonómicamente pensados y aunque cuestan un poco más que las de policarbonato normales, siguen siendo bastante menos que las de aluminio.
Así que con todos estos datos, nuestra recomendación sería que si estáis empezando con la fotografía submarina pero buscáis una carcasa robusta, la de Ikelite es una buena opción. Pero si el precio no es un problema y simplemente queréis lo mejor, os recomendaríamos la carcasa de aluminio Nauticam.
Facilidad de uso
A la hora de elegir tanto la carcasa como la cámara de fotografía subacuática que más nos convenga es sumamente importante hacerse preguntas del tipo, ¿son accesibles los controles? ¿Son multifunción o dedicados a una única? ¿Están los botones lo suficientemente lejos para que sea fácil su utilización con guantes? ¿Como es su diseño?… ¿puedo utilizarla mientras se mantiene firme en la carcasa?
Todas estas cuestiones nos despejarán las posibles dudas acerca de cual elegir.
Tamaño y peso
Finalmente y aunque éste no es un punto de inflexión, pues dentro del agua lógicamente el peso disminuye considerablemente, si vais a viajar con vuestro equipo, especialmente en avión, es algo a considerar.
Si te ha resultado de utilidad este artículo y estás pensando en comprarte una cámara subacuática, aquí puedes encontrar algunas del mercado.
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