España con los cetáceos
La observación de ballenas es una actividad con atractivo mundial que va en aumento, independientemente de la edad y los intereses de un individuo; los turistas viajan a los rincones más remotos del mundo para “echar un vistazo” a las ballenas en su ambiente natural. La oportunidad de ver a estas criaturas majestuosas e imponentes es sin duda una experiencia de toda una vida,
La observación de ballenas es aún muy joven en Europa. En comparación con otros continentes, Europa ya tiene la mayor parte del turismo del mundo – por lo que el mercado en general es fuerte. El mayor éxito de Europa ha sido el turismo cultural; pero poc a poco se sets imponiendo el turismo de naturaleza que ha tardado más en hacerse popular.
En España existen varias áreas adecuadas para la observación de ballenas, destacando Tarifa, en la provincia de Cádiz, y, sobre todo, de las Islas Canarias, con Tenerife en vanguardia. Hay muchas empresas que organizan salidas al mar durante todo el año, el ver a estas criaturas en la naturaleza es un espectáculo que tanto jóvenes como mayores disfrutarán. Es una experiencia única y emocionante .
Otras zonas en España sn proclives tambien al avistamiento de cetaceos como por ejemplo: El Mar Cantábrico, desde las Rías Baixas de Galicia y sobre todo el Golfo de Vizcaya, donde se pueden encontrar 27 especies de cetáceos, tanto residentes en sus aguas o que las visitan en algún momento del año.
El delfín común, listado o de nariz de botella; en alta mar, delfines de Risso, orcas y ballenas minke, de aleta, esperma, y las piloto de aleta. En ocasiones, también se ven orcas, falsas orcas, marsopas y ballenas picudas de Cuvier. Sin embargo, estos animales marinos, cetáceos y otros están siendo afectados por el derrame de petróleo costero del 2002.
Aunque los avistamientos de ballenas ocurren en diferentes partes del Mediterráneo, desde el Cabo de Creus a través de Columbretes e Islas Baleares, hay más posibilidades de ver ballenas y delfines en libertad en el mar de Alborán y la Costa de la Luz. Específicamente Tarifa en el Estrecho de Gibraltar, en el suroeste de España, delfines listados, mulares y comunes y se pueden ver durante todo el año las ballenas piloto. Desde abril a julio. cachalotes y orcas, que por lo general se mueven desde el norte de África a España en la segunda quincena de julio y a veces las ballenas de aleta a primeros del verano.
Las aguas cercanas a la costa del mar Mediterráneo y el oeste de Alboran, de la Costa del Sol a la Costa Blanca, tienen algunas de las mejores zonas del Mediterráneo para los delfines, sobre todo al este del Estrecho de Gibraltar. Las ballenas y delfines estan entre Cabo de Palos y Cabo de Gata, en el borde del Mar de Alborán.
Desde el Golfo de Valencia a la Costa Brava, incluyendo las Islas Baleares es otra posibilidad para el turismo de cetáceos. Hay delfines comunes, rayados y de nariz de botella, ballena piloto, de aleta y esperma.
Las Islas Canarias donde se mezclan las aguas tropicales por el norte con las frías del Atlántico por el sur, es también uno de los pocos lugares en el mundo donde el avistamiento de ballenas se puede realizar todo el año. En las aguas de las Islas Canarias se han identificado 30 especies de cetáceos, siendo uno de los lugares del mundo con mayor diversidad de cetáceos y de los mayores de Europa. Tenerife es la meca, donde puedes encontrar cantidad de empresas que se dedican a esta actividad ecológica y salen diariamente para la observación de cetaceos.
Las Islas Canarias rodeadas de altas profundidades es el lugar ideal para encontrar los cetaceos porque su ecosistema permitr la abundancia de alimento que consiste en peces y cefalopodos segun la especie.
Hay ballenas piloto de aleta corta y los delfines mulares. Se estima que hay 500 ejemplares de calderones residentes en las aguas de Tenerife y 250 de delfines nariz de botella. El sur de Tenerife es considerado una de las mayores zonas de reproducción de esta especie en Europa. La ballena minke también es muy común en la isla y se acerca a Tenerife durante todo el año siguiendo a los cardúmenes de sardinas.
Sin embargo, hay inconvenientes en esta actividad, un creciente cuerpo de investigación sugiere que si no se maneja con cuidado, la observación de ballenas puede ser perjudicial para las ballenas y los delfines en peligro de extinción por la interrupción de actividades como la caza y el descanso, el ruido de las embarcaciones de los observadores de ballenas podrían enturbiar las señales de ecolocalización que ayudan a las orcas para la caza de su alimento; es por ese motivo que una nueva coalición de empresas de avistamiento de cetaceos de todo el mundo está poniendo en marcha una asociación única para hacer algo al respecto.
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