Muchos enigmas, y alguna respuesta, sobre este animal marino
Cuando hablamos del hipocampo, no son pocas las personas las que hablan de él como si de un mito se tratase. De hecho, como ahora veremos más en detalle, la mitología reserva un espacio muy especial para él. Sin embargo, ¿qué sucede cuando hay personas que afirman haber tenido a este monstruo marino frente a sí?
El hipocampo dentro de la mitología
Habría que retrotraerse hasta los tiempos de Homero para poder leer en sus poemas las primeras referencias a este animal marino. De hecho, sin ir más lejos, podemos ver en la Iliada, el poema homérico por excelencia, cómo el dios de los mares, Poseidón, utilizaba a estos hipocampos para tirar de sus carros. Unos carros que, por cierto, eran capaces de caminar sobre la superficie del mar. Tal era la fuerza de este ser marino que los carruajes no penetraban en las profundidades del líquido elemento.
No obstante, las referencias que se hacen al hipocampo dentro de todo lo relacionado con la historia de los monstruos marinos dentro de la mitología, son mucho más extensas que las que hacía Homero. No en vano, no solamente tenían como misión tirar de los carros de Poseidón. Eran mucho más que meros sirvientes. En algunas ocasiones podían llegar a actuar como seres con una gran humanidad al punto de rescatar a aquellas personas que se adentraban en los mares y eran tragados por sus aguas.
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Sin embargo, como en todo mito, depende de la fuente en la que se consulte, sus cualidades son más o menos magníficas. Apolonio Rodas, en su poema que lleva por nombre Argonáuticas, asegura que el hipocampo está muy lejos de ser un animal marino excepcional. Es más, hasta tal punto llega que asegura que no es más que un caballito de mar de los que se pueden encontrar en cualquier punto del planeta. Como se puede apreciar, las discusiones sobre la naturaleza de este ser no son cosa únicamente del siglo XXI.
La realidad de este monstruo marino
Pero dejemos de lado la mitología marina para centrarnos en lo que encierra de realidad este enigmático ser. Y es que, tras beber de varias fuentes, la descripción que más se repite a lo largo de la historia, asegura que el aspecto que tenía era el que podría tener un híbrido entre un caballo y un pez.
Para concretar, la cola sería de un pez, de ahí que fuera un animal que procedía de los mares, y el cuerpo, el cual, le confería gran fuerza, pertenecería a un caballo. Este aspecto, le confería la habilidad de poder adaptarse tanto a las condiciones acuáticas como a las condiciones terrestres.
Partiendo de esta base, no es extraño que la inmensa mayoría de personas, y de estudiosos, lo incluyan dentro de los tratados de mitología marina que nos podemos encontrar. Sin embargo, no son pocos los testigos, evidentemente no modernos, los que aseguran que su embarcación en alguna ocasión ha sido flanqueada, en momentos de zozobra, por este animal marino. Era como si, de algún extraño modo, el hipocampo sirviera de escudo, como de ser protector para que, aquellos hombres y aquellas mujeres, que se debatían entre la vida y la muerte, pudieran llegar a tierra sanos y salvos.
Periodista colaborador de Nautical News Today especializado en monstruos marinos e historia marítima. Hydra, pez sapo, el lago ness, ….