La grandeza de una estrella como Mick Fanning empieza cuando demuestra habilidades especiales en algo como el surf pero se consagra cuando empatiza con el mundo y ve que su horizonte es el mismo que el del resto del mundo, filosóficamente hablando.
A ese nivel es el que ha llegado Fanning que mientras surfeaba / entrenaba, se encontró en el camino con un amateur que hacía bodyboard y en vez de rechistar, enfadarse e increpar al susodicho que había tenido la osadía de fastidiarle la ola, Mick Fanning reaccionó con mucho «Flow», subiéndose al bodyboard y surfeando unos metros la ola con su compañero del destino…
Muy grande Mick, muy grande.
Editor especialista en el deporte de vela, tanto en vela oceánica como en vela ligera y olímpica. Colaborador de prensa deportiva a nivel nacional.