Los sistemas de alertas de tsunamis o maremotos. ¿Cómo lo hacen?

Que los sistemas de alertas de tsunamis son algo que pueden salvar vidas, es algo sobre lo que no podemos discutir. Sin embargo, sobre lo que sí se puede discutir es sobre las normas y el conjunto de directrices que tienen que tener dichos sistemas. Pues bien, aquí y ahora vamos a hablar de los pilares principales sobre los que deben girar estos sistemas.

Cálculo de probabilidad de ocurrencia de tsunamis

Este es el primer pilar sobre el que debe girar este asunto. Y es que, como nos podemos imaginar, no se pueden adoptar las mismas medidas cuando hablamos de una zona en la que el riesgo de que se produzca un tsunami es mínimo que en una zona en la que puede darse con cierta frecuencia.

Sin embargo, hay que hacer hincapié en que el cálculo de probabilidad tiene que ser algo dinámico y periódico, es decir, debe ser un cálculo que se haga cada cierto tiempo para tener un dato actualizado y real.

Información sobre las zonas costeras

Junto con la probabilidad de tsunami, se podría decir que esta información es la más importante. Más que nada porque gracias a ella vamos a saber si las costas, atacadas por un tsunami en un futuro, son susceptibles de provocar aún más problemas de los que ya de por sí tendría la población con un maremoto.

En consecuencia, tener siempre una información actualizada y contrastada de las costas de cualquier punto del planeta, siempre es un buen punto de apoyo en el que ayudarse para comenzar a construir diferentes medidas.

Sincronización de los sistemas de alertas de tsunamis

Un aspecto muy importante y que en muchas ocasiones no se cuida todo lo se debiera. Y es que cualquier sistema de alertas de tsunamis que se precie debe tener perfectamente sincronizada con la hora local el momento del impacto de la ola de turno de manera que las autoridades, precisamente locales, puedan tener un margen de maniobra lo suficientemente holgado como para preparar cualquier tipo de actuación.

Coordinación de cuerpos de seguridad

Por ser el último punto no quiere decir que sea el menos importante. De hecho, si las autoridades locales, policía, bomberos y equipos de rescate, no están coordinados ante una eventualidad de esta magnitud, de poco van a servir las medidas previas que se han tomado para detectar un tsunami con la antelación suficiente.

De este modo, se debe tener un protocolo perfectamente ensayado y actualizado de manera que la actuación dure el menor tiempo posible ya que esto significará salvar un buen número de vidas.

Un conjunto de directrices que ponemos como generalista pero que cualquier nación que se precie debería tomar como suyas y adaptarlas a la realidad del entorno en el que viven. Cierto es que la probabilidad de este tipo de fenómenos es baja pero, ¿Somos conscientes lo que supondría poder salvar una gran número de vidas?

Si te resulta interesante esta información, te dejamos enlazado el artículo que publicamos anteriormente sobre «que hacer en caso de tsunami o maremoto».