Restaurantes marineros. El Mosqui

En la pequeña población murciana de Cabo de Palos se encuentra uno de los restaurantes, cuya fama ha trascendido más allá de sus alrededores. En una zona de mar intensa, la oferta de El Mosqui se inscribe en la cocina marinera.

Sin duda alguna las aguas del cabo de Palos, uno de los puntos geográficos de referencia de la costa mediterránea, gozan de una riqueza biológica destacable, influida por la cercanía del mar de Alboran y el estrecho de Gibraltar, delimitados por el cercano cabo de Gata. Si lo unimos a la lógica tradición marinera de Cabo de Palos, se comprende fácilmente la gran aceptación de El Mosqui y de su oferta gastronómica marinera.

La pequeña población es un punto de paso obligado para acceder al importante destino turístico de La Manga, cuyo auge favoreció el desarrollo de algunos establecimientos como nuestro protagonista. El Mosqui se ubica en pleno centro, concretamente en el número 50 de la Subida al Faro, cuya cubierta incluye el antiguo castillo de gobierno de un pesquero. Su espacio un espacio interior es sencillo y con detalles decorativos del mar, acorde a su origen, cuando José de la Orden junto a su mujer Catalina montaban años atrás un chiringuito con maderas traídas a las playas por los temporales. Fueron unos inicios donde el pescador buscaba una ayuda económica para pasar los largos inviernos, en el entonces pequeño pueblo habitado por 30 familias. También posee una gran terraza, muy apreciada en las noches de verano.

 

Su origen pescador y en su marco de mar no podían desembocar en una carta donde el producto estrella fuera el pescado. Y si un plato marinero ha hecho famoso al Mosqui es el preciado arroz de caldero. Un potente plato que debe degusrtase en dos fases: primero el arroz y después el pescado que se ha empleado para hacer el exquisito caldo del arroz. Mejor ir con hambre, sin prisas y con poco importante que hacer tras la comida. No es casualidad que el eslogan de la casa rece: “De la mar el mero, y del Mosqui el Calderero”.

Junto al plato estrella de la casa, en la carta también se ofrecen diversas paellas y arroces de mar, no faltando el Arroz Ciego, con todos los trozos de pescado y marisco limpios para comerlos sin tener que rebuscar o trabajar pelándolos. Pescados, frituras y pulpo animan la oferta de El Mosqui, que también incluye entrantes de ensaladas muy apreciadas por la calidad de la materia prima de la huerta murciana. Gazpacho o salmorejo no faltan en sus propuestas, como tampoco diversos de carpaccios de pescado propuestos como entrantes.

El Mosqui no es un establecimiento que abuse de su fama ni ubicación turística, como demuestra algunos menús económicos que incluye su carta, y que por menos de 20 euros nos permiten degustar un par de platos, postre y bebida.

Para celebraciones a mediodía, El Mosqui dispone de diversos menús que permiten adaptarse al bolsillo de los celebrantes. Busquen una excusa cualquiera y acudan, merece la pena.

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